‘Últimamente Estoy Muy Fervoroso Pero lo Que Realmente Quiero Es Estar Enamorado’, o joie de vivre
“El que ama se transforma constantemente, es más productivo, es más él mismo”.
Volvemos a las sesiones nocturnas de El Umbral de Primavera, esta vez para adentrarnos en Últimamente Estoy Muy Fervoroso Pero lo Que Realmente Quiero es Estar Enamorado, lo que podríamos llamar un ‘unipersonal interruptus’ de Juando Martínez Montiel sobre una dramaturgia de Pablo Canosales que recupera el formato íntimo de las noches de cabaret para que, a través de la inmediatez y la complicidad con el público, su protagonista – partiendo de experiencias y vivencias personales, entrelazadas con canciones, ya sea de nueva creación o grandes clásicos- pueda reivindicarse como ser humano; reivindicar la necesidad de amar y ser amados y gritarle al público esa necesidad de que fluya la alegría de vivir, la joie de vivre que da título a esta reseña.
Y es que Últimamente Estoy Muy Fervoroso… –que, hasta donde sé, tuvo su germen como proyecto de fin de carrera de su protagonista en la RESAD- es, en primera instancia un gran cabaret en miniatura con todas las de la ley –escenario dispuesto ante luces tintineantes y espacio flanqueado por mesas en las que el público de primera línea se puede acomodar- en el que el protagonista –atavidado a la manera de un maestro de ceremonias- busca desnudar su alma, ajustar sus cuentas pendientes – las del pasado y las del presente; tal vez para que ciertas cosas no vuelvan a sucederle en el futuro- con la camaradería de un público al que no duda en dirigirse una y otra vez para pedir opinión o aprobación. Es, de alguna manera, como si el Juando del presente mirase frente a frente al Juando del pasado mediante un repaso de pequeñas anécdotas –algunas jocosas, otras más espinosas; pero aquí siempre miradas desde la ironía- que el protagonista revive casi como curado de espanto; con capacidad irónica de reírse de sí mismo a pesar de estar hablando de cuestiones como el descubrimiento de la identidad sexual y –¿por qué no decirlo?- el descubrimiento de la identidad personal general por extensión. En los recuerdos de Juando Martínez ya no hay lugar para el resentimiento; porque el personaje-actor ahora se reconoce, se reafirma, está encantado de conocerse y reivindica no sólo su derecho si no su deber de quererse y reafirmarse en quién es; pero para ello precisa también del feeling, que se vuelve otro de los grandes motivos conductores. La conexión, la complicidad con el público, y la necesidad de que, dentro de su derecho a amar y ser amado, el artista se complete en el público como ente global. Porque, a través de sí mismo, Juando nos enseña – y casi se diría que nos obliga- a querernos a nosotros como imposición, como máxima con la que debemos salir del espectáculo: queriendo y queriéndonos.
A fin de cuentas, podemos decir que más que un paseo por el pasado de Juando Martínez para comprender su presente, Últimamente Estoy Muy Fervoroso Pero lo que Realmente Quiero Es Estar Enamorado es un gran canto al amor en todas sus vertientes, al derecho y a la necesidad de amar y ser amados; y al amor como motor del mundo y forma primera de esa alegría de vivir, ese fervor que nos irradia y contagia Juando; todo ello, claro, pasado por los filtros y códigos del cabaret –ya sea el berlinés, el parisino…-; desde una prosa picarona e irónica que implica directamente al público y en el que, entre monólogo y monólogo, se van desgranando canciones que beben de fuentes tan dispares como Edith Piaf, Nat King Cole o Raphael. Pero Juando Martínez no está solo en su periplo. Porque le acompañan La Cantante – una cupletista que recupera el personaje de Berta, una de las Livianas Provincianas; montaje en el que Juando Martínez se encargaba del piano y que pudimos ver hace unos meses en esta misma sala- y la pianista. Y, aunque inicialmente sus roles podría parecer que van a ser meras comparsas; acaban sin embargo bien integradas en una especie de intermedios que permiten al protagonista cambiar su vestuario, al tiempo que llegan a desarrollar una pequeña trama complementaria, también salpicada de canciones. Esta inclusión – que acaba siendo funcional y oportuna- da una idea de la dificultad del trabajo de Pablo Canosales en la dramaturgia. Primero porque ha tenido que escribir un texto a partir de las experiencias reales de Juando Martínez – con la dificultad que ello conlleva: uno podría pensar que lo lógico hubiese sido que el propio artista se hiciese cargo de escribir la función-; y después porque, al integrar estas pequeñas pausas en trama paralela se nota esa cierta voluntad de que, dentro de la sencillez que pide el formato del espectáculo haya, efectivamente, una cierta dramaturgia que deja su trabajo a medio camino entre la generosidad de apartarse y ceder el protagonismo a quien lo merece; y la voluntad de apostar siempre por esa cierta teatralidad que han de tener este tipo de espectáculos -llamémosles cabarets, sesiones golfas, cafés-teatro, cafés-concierto o como se tercie-.
Todo en esta propuesta es sencillo, desde la concisa puesta en escena de Rebeca Sanz- Conde – piano, iluminación de cabaret y apenas un par de elementos de atrezzo- hasta la voluntad de Juando Martínez de conseguir algo tan sencillo y a la vez tan complicado como es la complicidad, hacer pasar un buen rato y que el público, desinhibido, se sienta parte de la experiencia. La capacidad de Martínez Montiel como artista integral – cantante, monologuista y casi se diría que demiurgo por esa capacidad de conectar con cada una de las butacas de la pequeña sala- está sobradamente probada; y si podríamos decir que este formato más o menos unipersonal y cabaretero se ha hecho otras veces desde otros prismas –¿cómo no pensar en El Intérprete con todas las diferencias que, sin embargo, hay entre una y otra?- hay que señalar también que Últimamente Estoy Muy Fervoroso Pero lo que Realmente Quiero Es Estar Enamorado juega con armas semejantes; pero respetando siempre un formato de intimidad y cercanía que le hacen llegar justo allá donde busca. Es una propuesta fresca, honesta y sincera de un género que no abunda en la cartelera; y también un espectáculo gozoso, lleno de buen rollo y divertido que, efectivamente, consigue lo que quiere; y que – lejos de ser una anécdota- se prolonga durante 100 minutos que pasan en un suspiro. Hay que tener mucha destreza para cargar un espectáculo como este sobre sus espaldas como Juando Martínez lo hace; y mantener el interés como lo consigue no es moco de pavo. Junto a él, Irene Domínguez –en su cuarta aparición en este blog desde que comenzase la presente temporada- vuelve a equilibrar sus dotes vocales con sus dotes de comedianta; en un personaje que, por supuesto, tiene bien cogido por el espectáculo del que surge; y Tanit Jaén acompaña todo el espectáculo de manera certera al piano, al tiempo que se integra en la propuesta escénica lo poco que se le permite.
Últimamente Estoy Muy Fervoroso… es pues una propuesta íntima pero al tiempo distendida, divertida y directa; que amplía la oferta en torno a un tipo de espectáculos –los musicales en el más puro estilo cabaretesco- que no abundan en la cartelera defendida por un grupo de profesionales de primer nivel y que tiene el acierto y la honestidad de llegar justamente allá donde se propone: ni más ni menos que eso. Más allá de los valores que transmite –el amor en toda su amplitud, la alegría de vivir- lo cierto es que se pasa un rato estupendo y se respira ambiente de comunión entre público y escena. En definitiva, un espectáculo musical particular en su género – casi tanto como lo son las Livianas Provincianas que también nacen de buena parte de este equipo-; que demuestra que se pueden ver buenos espectáculos musicales en Madrid sin tener que apostar por costosas producciones de gran formato. En su honesta y directa sencillez canalla, irradia la más auténtica alegría de vivir.
H. A.
Nota: 3.25 / 5
“Últimamente Estoy Muy Fervoroso Pero lo Que Realmente Quiero Es Estar Enamorado”, de Pablo Canosales. Con: Juando Martínez, Irene Domínguez y Tanit Jaén. Dirección: Rebeca Sanz-Conde.
El Umbral de Primavera, 10 de Febrero de 2018